sábado, 16 de mayo de 2009

ENTRE LAS ESTRELLAS

Es fácil de entender. Desde que has desaparecido vago  con un agujero en el estómago. Es como viajar y descubrir,cuando has llegado, que te has olvidado el cepillo de dientes. Es como cuando se buscan las llaves del coche, que estaba seguro de haber puesto allí, dentro de aquel cajón, lo recuerdo muy bien, y sin embargo, allí no están. A mí me ha pasado un poco así, por eso he empezado a buscarte en los sitios donde estaba seguro que nunca te encontraría, mirando de reojo entre la multitud a la salida del metro, entre las fotos que te llevaste,  detrás del sofá por si te hubieses resbalado por ahí.
Después, un día en el que me había prometido cambiarme de calcetines, mientras intentaba quitar una mancha de yogurt seca en el sillón, he ojeado el horóscopo de un periódico, y finalmente he entendido
  donde te habías metido. “La Luna aconseja hacer un viaje distendido”, ponía al lado del dibujo de tu signo. No he podido evitar imaginarte en alguna parte, en una playa con algo de beber en la mano, sonriente, con tus pecas distribuidas en los sitios donde las recordaba. De esta forma empecé a seguirte todos los días a través de los astros: un día tenías suerte en los negocios, otro día estabas mal, otro salías por la noche buscando los encuentros provechosos que te anunciaba Mercurio, o bien, a veces, no disfrutabas de la gracia de Júpiter y tenías que estar un poco triste. Pero, al día siguiente, volvías a tener problemas para hacer comprender plenamente tus justas intenciones o para estar bajo la influencia de Venus.
Ha sido hermoso recordarte ahí arriba, donde la eternidad es un extra incluido en el precio, donde es más fácil amarte y las fotos están aún en su sitio, ordenadas por fecha en el álbum de la tapa violeta.
En cambio, las llaves del coche, esas, no las he vuelto a encontrar.

10 comentarios:

  1. [...] ahí arriba, donde la eternidad es un extra incluido en el precio [...]Hermoso leerte.
    Triste recordar que yo tampoco las volví a encontrar...

    Un saludo :)

    pS.: Me ha gustado leerte también en italiano... quién diría que eres tú el mismo autor ;)

    ResponderEliminar
  2. Desde luego una linda metáfora. un placer conocerte
    bss

    ResponderEliminar
  3. que lindo.... de verdad que me ha deleitado...
    besitos.

    ResponderEliminar
  4. pati

    Entiendes el italiano? Pues entonces puedo contestarte con mi idioma... No sabes quanto me costa escribir en castellano :)... El vantaje de no ser mi mismo es que puedo no ser mi mismo in qualqier sitio :)

    ResponderEliminar
  5. terapia

    Ojala fuera una metafora.... :)
    El placer es el mio

    ResponderEliminar
  6. Zaya

    Me gusta que te gustan las mismas cosas que me gustan... Hem... :)))

    ResponderEliminar
  7. No.soy.yo.... casi entro a saco con todo mi arsenal en tu blog... ¡agggg que entrada mas angustiosa! ¡y pobre perro ficticio!, lo primero que pensé es que si, que mucha metáfora, pero que hay gente pa tó... y que la realidad supera la ficción...los animales maltratados son mi pesadilla de cabecera, así que pensé que tu tenías la gracia en el... por recordármelo, iba a entrar a dar guerra cuando... he seguido leyendo, y he de decirte que me he leido tooodo tu blog de un tirón, me ha encantado como escribes, es genial, ¡que arte amigo! decididamente me enamorao ;)

    ResponderEliminar
  8. Cristina

    Madre mia que suerte he tenido... No puedo pensar que he arriesgado el poder ser hecho a trozos por una guerrera tan poderosa :)) Me gusta, a veces, escribir cosas provocatorias, creo es mi estilo... Y aunque no me gustan mucho los perros, nunca mataria a uno... Gracias por tu comentario, pero nuestro amor tiene un destino muy malo, por que ya tengo novia :))))) Hasta pronto!

    ResponderEliminar
  9. No te preocupes, yo soy como el diablo, solo me interesa tu espíritu, no tu cuerpo... y además no soy celosa ;)

    ResponderEliminar
  10. Ahahahahh... Pues mejor: yo tampoco :))

    ResponderEliminar